Durante mi deambular por la blogosfera literaria he podido constatar que no soy precisamente lo que se dice sociable.
No comento mucho y las veces que lo hago suelen ser comentarios algo largos, dando mi opinión sobre algún tema, nada de cosas del estilo "me lo apunto".
No reseño libros "de moda" ni muchas novedades. En realidad, hay veces que tengo la sensación de que casi nadie ha leído muchos de los libros de los que hablo y de que no me interesan la mayoría de los libros "de los que tanto habla la gente" (prometo que algún día me explayaré sobre este tema, al igual que hice algún tiempo con la novela histórica).
Aunque bien pensado eso es una ventaja para el blog. Si hubiese reseñado el "medio centenar de sombras grises", la mía sería una más entre cientos de reseñas del mismo libro, en cambio, reseñar «La puerta de los tres cerrojos» hace que, además de leerme un libro bastante entretenido, sea una de las pocas reseñas que hay en la web.
No participo en lecturas conjuntas ya que me molesta mucho leer por obligación y que, además, me digan qué es lo que tengo que leer. Eso mismo me pasó muchas veces en el instituto y no estoy por la labor de que me vuelva a suceder. Las lecturas conjuntas me parecen un ejercicio de retroalimentación endogámica de bloggers con un cierto perfil común y de los que suelen salir unas cuantas reseñas que dicen prácticamente lo mismo.
Mención aparte me merecen los retos de lectura. Tener que, por ejemplo, leer quince libros de autores de la antigua Yugoslavia, estar un mes sin leer "novedades" o leer en un año treinta libros de novela negra (y que conste que es uno de mis géneros favoritos), más que un "reto" me parece una soplapollez.
No reseño libros "de moda" ni muchas novedades. En realidad, hay veces que tengo la sensación de que casi nadie ha leído muchos de los libros de los que hablo y de que no me interesan la mayoría de los libros "de los que tanto habla la gente" (prometo que algún día me explayaré sobre este tema, al igual que hice algún tiempo con la novela histórica).
Aunque bien pensado eso es una ventaja para el blog. Si hubiese reseñado el "medio centenar de sombras grises", la mía sería una más entre cientos de reseñas del mismo libro, en cambio, reseñar «La puerta de los tres cerrojos» hace que, además de leerme un libro bastante entretenido, sea una de las pocas reseñas que hay en la web.
No participo en lecturas conjuntas ya que me molesta mucho leer por obligación y que, además, me digan qué es lo que tengo que leer. Eso mismo me pasó muchas veces en el instituto y no estoy por la labor de que me vuelva a suceder. Las lecturas conjuntas me parecen un ejercicio de retroalimentación endogámica de bloggers con un cierto perfil común y de los que suelen salir unas cuantas reseñas que dicen prácticamente lo mismo.
Mención aparte me merecen los retos de lectura. Tener que, por ejemplo, leer quince libros de autores de la antigua Yugoslavia, estar un mes sin leer "novedades" o leer en un año treinta libros de novela negra (y que conste que es uno de mis géneros favoritos), más que un "reto" me parece una soplapollez.
Después de decir esto no sorprenderá mucho que diga que tampoco suelo participar en sorteos que organizan otros blogs. De hecho, este es el primer concurso en el que participo y lo hago por dos razones.
La oreja de Jenkins es uno de mis blogs favoritos; lo descubrí poco después de empezar con mi blog y me encantó desde el primer momento; no solo porque me gusta la forma de reseñar que tiene Alejandro sino porque además sus gustos literarios coinciden mucho con los míos.
La segunda razón es que me gustan los dos libros que sortea y no me he leído ninguno de los dos.
Así que ya sabéis, si queréis participar en el sorteo no tenéis más que clickar en el banner de la derecha (o en la imagen de esta entrada si he sido capaz de hacerlo bien) y seguir las instrucciones que aparecerán. Si no queréis participar no tenéis más que pasaros por La oreja de Jenkins y curiosear un rato, lo más seguro es que se convierta en uno de vuestros blogs favoritos.
Egoistamente os recomiendo la segunda opción, así será más fácil que me toque alguno de los dos premios, pero tampoco me cabrearé mucho si decidís participar.
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